Les trabajadores sostienen el mundo y de su lucha surgirá la vida digna
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Toda sociedad requiere la realización de diversas actividades que sirven de sustento para su existencia. Es difícil imaginar un Chile donde la ropa, la comida o la electricidad no formen parte del día a día. La gran mayoría de los servicios y productos que consumimos están monopolizados por empresas privadas o públicas que no serían capaces de materializar ninguna cosa si no fuera por la labor humana y la fuerza de trabajo detrás de ella. Así, una vez superada la ‘caja negra’ detrás del producto que tenemos en nuestras manos, evidenciamos la labor de carpintería que está detrás de la mesa, el código hecho por la desarrolladora de software, la pulcritud de los espacios que frecuentamos que se mantiene por la labor de la encargada del aseo y, con ello, reconocemos que a este mundo lo sostiene la clase trabajadora.
Por eso, y tras la conmemoración del Primero de Mayo, reconocemos que somos dueñas de nuestro destino y que llueva, truene o relampaguee es nuestro deber combatir la opresión, la miseria y la marginalización con solidaridad, acción directa y con la certeza de que la libertad de una es imposible sin la libertad de todas.
Los trabajos invisibilizados: las labores domésticas y de cuidado son trabajo
¿Y qué hay que decir de las personas cuidadoras y trabajadoras del hogar?, ¿no se les debe a ellas justicia por la labor esencial que nos permite perseguir objetivos industriales y técnicos complejos?, ¿qué sería de la vida de la familia sin que en su hogar no se asegurara el sostenimiento básico de las condiciones mínimas de limpieza, alimentación, ropa, utensilios y cuidados?Por mucho tiempo a nuestras compañeras, que en la mayoría de los casos son designadas a cuidar del hogar y la familia, se les ha negado el reconocimiento de que su labor tiene valor. Por eso, queremos aprovechar para cuestionar la división sexual del trabajo e insistir en que el trabajo doméstico y de cuidado es un asunto que nos compete a todes, es necesario que se colectivice y eliminemos así la sobrecarga en las mujeres y cuerpos feminizados.
En Chile el 50% de las personas ocupadas ganan 503.000 pesos al mes (2024)
El descaro con que se nos vende en Chile las noticias del “crecimiento económico” es tan abismal como la brecha entre ricos y pobres; la copa de la torre del neoliberalismo nunca se rebasó, se hizo más grande y gotea solo para no romperse, cayendo migajas comparadas con la totalidad de la labor realizada por quienes las recibimos. ¿Cómo se pretende realizar una vida digna con un sueldo tan bajo que ni siquiera es capaz de compensar los gastos mensuales de un adulto? Así como debemos exigir la reducción de nuestra jornada, porque es justo tener más tiempo para desarrollar nuestra vida personal y colectiva, disfrutarla y descansar, también debemos exigir la mejora de nuestros sueldos, porque necesitamos condiciones materiales mínimas para vivir un poco mejor. Pero, además, no podemos dejar de mirar hacia ese mañana distinto, ya que, esta realidad que nos impone el capital nunca permitirá que la vida digna germine, ya lo hemos visto, el capitalismo solo ofrece pobreza y muerte, ha demostrado por muchos años que está diseñado para mantener la dominación y la vida digna es una vida libre.
Manteniendo y avivando la llama de nuestras luchas
Cerramos este texto haciendo hincapié en que:
- La memoria de nuestros pueblos y sus luchas son fundamentales.
- Les trabajadores del mundo estamos unides como clase, indistintamente de nuestro origen, la lucha de les trabajadores es una y sin fronteras.
- Les trabajadores hacen a la sociedad funcionar y sin nosotres, no hay nada.
- La labor doméstica y de cuidado es trabajo.
- La mayoría de trabajadores de Chile vive en condiciones de pobreza o cercanas a esta.
Si nos organizamos como oprimidas y logramos hacer que nuestras luchas particulares se conviertan en una fuerza coordinada y colectiva que impulse formas de vivir y hacer comunitarias y autogestivas, podremos vencer sobre cualquier forma de dominación: sea aquí o en el resto del mundo.
¡Arriba las, les y los que luchan!
Movimiento Solidario Vida Digna – San Joaquín